El autoestopista
Esta mañana me ha pasado una de esas cosas que me hacen sentir viva. Resulta que fui a Brians II para echar allí mi media jornada y, al...
Entre cristales y cortinas (rotas)
Dije que iba a compartir lo que le escribí a una persona secreta hace ahora dos o tres años para dejar patente mi falta de...
¡Que no! ¡Que no soy (ni quiero ser) ninguna profesional!
Hace unos días alguien apeló a mi profesionalidad para decirme “n’importe quoi” –no me gusta emplear expresiones en otros idiomas porque...
Doce de espadas
Nada podía hacerme sospechar que la noticia que iban a darme el pasado 25 de abril al descolgar el teléfono iba a ser la de tu muerte,...
Entre plata y aluminio de primera ley
Cuando entro en una cocina que no tiene papel de plata, sencillamente me pongo a temblar. No lo puedo evitar, de verdad, me sale solo. El...
Justicia sin escrúpulos, títeres sin cabeza
Muchas veces la abogacía se tacha de clasista, excluyente y elitista. Yo también suelo verla así, pero a veces me nace la vena utópica...
El Minimor de Orwell
“El Ministerio del Amor era terrorífico. No tenía ventanas en absoluto. Winston nunca había estado dentro del Minimor, ni siquiera se...
Frankenstein
La primera vez que leí Frankenstein, lo hice atraída por una especie de instinto inexplicable; como si aquello hubiera sido algo que...
Que se haga la guerra
Hoy me he enterado de que has muerto. Mi querido HuesoPavo, Huesito, que yo te llamaba… Hoy me he enterado de que has muerto. Me he...
Orgullo de necios
Yo no sé hasta qué punto puedo llegar a tener las cosas claras, pero si existe una verdad absoluta en este mundo que pueda sostener por...